Aguamarina


Este mineral es una piedra de coraje. Sus energías calmantes reducen el estrés y relajan la mente. Armoniza su entorno y protege contra la polución.
Psicológicamente, la aguamarina, es afín a las personas sensibles, tiene el poder de invocar la tolerancia de los demás. Calma la mente, retirando los pensamientos accidentales además de aliviar los miedos e incrementar la sensibilidad.
Espiritualmente agudiza la intuición y provoca clarividencia. Es fantástica para meditar, proteger el aura y alinear los chacras, limpiando a su vez el de la garganta.
Colócala donde sea apropiado.

Muy eficaz puesta sobre los ojos o tomada como elixir.

Es la piedra de los marineros y viajeros un amuleto muy utilizado por las personas con fobias y mareos a los viajes en barco o avión.

El aguamarina refuerza el campo magnético y trae buena suerte.

Aporta felicidad y bienestar a quien la lleva, se dice que provoca la sonrisa y la alegria de las personas que la llevan.
Nos produce paz y sosiego.

Fortalece el sistema nervioso central, el hígado y los riñones.

Cura las impurezas de la piel, indicado para los dolores de la nuca, mandíbulas y dientes, así como las afecciones de la garganta.

Es una piedra que ayuda a la expresión y al diálogo de quien la lleva.